¿Puede afectar mi grupo sanguíneo a mi bebé?

SANGRE DE MI SANGRE, ¿DEBO PREOCUPARME?

Una de las preguntas más habituales que hacen los médicos a los futuros papás en las consultas prenatales es cuál es el grupo sanguíneo de ambos. Puede que les suene extraña esta pregunta o les sorprenda y preocupe, pero… ¡tranquilos! Esta pregunta tiene que ver con el factor Rh de la sangre, ya que puede haber problemas si el de la madre es Rh- y el del bebé Rh+. En esta entrada os hablaremos de en lo que consiste dicho problema y su tratamiento, el cual es seguro y hará que tengas una preocupación menos sobre tu bebé.

EL SISTEMA RH

El sistema Rh es un sistema complejo que comprende 40 antígenos en los glóbulos rojos (proteínas propias o extrañas al cuerpo que tienen la capacidad de generar una respuesta inmunitaria para que se generen anticuerpos específicos que se unan a ellos). El antígeno que más interesa es el denominado antígeno D. La presencia de este antígeno determinará Rh+, y la ausencia del mismo, Rh-.

El Rh de un individuo viene determinado por el Rh de sus progenitores. El caso que nos interesa en este artículo es en el que la madre es Rh - y el padre, Rh+, por lo que el niño será, probablemente, Rh+ (también puede ser Rh-, pero es poco probable y no supondría ningún tipo de problema). Este caso se denomina incompatibilidad del Rh.

INCOMPATIBILIDAD DEL RH Y PATOLOGÍAS

La incompatibilidad del Rh no tiene ningún problema en el primer parto, ya que durante la gestación no se produce mezcla de sangre entre el feto y la madre, pero en el momento del parto sí que se produce mezcla. El niño nace sin ningún problema, pero al haberse mezclado sangre Rh+ (del hijo) con sangre Rh- (de la madre), la madre pasa a tener el antígeno D en su torrente sanguíneo, por lo que genera anticuerpos contra dicho antígeno, así que su cuerpo, al exponerse otra vez a dicho antígeno, lo detectará como extraño y tratará de eliminarlo con los anticuerpos, una respuesta inmunológica permanente pero que tarda en actuar.

En un segundo embarazo si el feto vuelve a ser Rh+ el cuerpo de la madre tendrá anticuerpos contra dicho antígeno, por lo que identificará la sangre del feto como algo extraño al cuerpo y tratará de eliminarlo. Este tipo de anticuerpo puede atravesar la barrera placentaria y destruirá los glóbulos rojos del feto. Esta enfermedad es conocida como eritroblastosis fetal o enfermedad hemolítica del recién nacido. Puede producir un mortinato o un niño con anemia hemolítica, lo cual hace que el bebé nazca con altos niveles de bilirrubina debido a la constante rotura de glóbulos rojos. Los altos niveles de bilirrubina provocan daños encefálicos y la enfermedad denominada kernicterus, la cual causa deterioro mental permanente o daño de las áreas motoras cerebrales.

Obviamente no queremos alarmaros con esto, por lo que ahora os comentaremos un tratamiento para ello.

TRATAMIENTO DE PREVENCIÓN DE ERITROBLASTOSIS

Si ya tuviste un parto (aunque numerosas veces se realiza el mismo procedimiento, incluso si es el primer parto, siempre y cuando pueda haber una posible incompatibilidad del Rh) y tu bebé fue Rh+ y tú eres Rh-, si tienes intención de tener otro o crees que estás embarazada deberás comentárselo a tu médico y este te mandará hacer una analítica para analizar cuantos anticuerpos tienes debido al anterior parto. Después de la analítica se procederá al tratamiento que consistirá en una inyección de inmunoglobulinas de Rh, lo que impedirá que la madre fabrique más anticuerpos e inutilice los ya sintetizados, con el objetivo de que el feto pueda desarrollarse tranquilamente y el bebé pueda nacer sin ningún problema. 

También es conocida la vacuna anti-D. La inyección será en dos dosis: una a las 28 semanas de gestación y otra 72 horas antes de dar a luz. Durante este periodo de tiempo se harán analíticas para observar la situación y ver cómo evoluciona el caso.

 

    Como conclusión: si quieres ser una futura mamá y eres Rh- y el padre es Rh+, debes decírselo al médico y tomar todas las precauciones posibles. Ya has visto que no hay ningún problema con el tratamiento y ya tendrás una preocupación menos, ¡así solo tendrás que preocuparte si el bebé nacerá sano o muy sano!

Esperamos que este post os haya sido de gran ayuda y os haya quitado miedos y animado a tener hijos. Cualquier duda podéis comentarla y trataremos de resolverla cuanto antes.

¡Gracias por leernos! Volveremos pronto con más publicaciones.

Bibliografía:

1- Martín Velasco, Ana Isabel y Carón Lucena, Emilio. Capítulo 5: La sangre. Bases de la Fisiología Editorial Tébar 2ª Edición.

2-  Fuentes, Armando (octubre de 2018). La incompatibilidad de Rh durante el embarazo.